Y sentíamos temor de que llegara, cuando veíamos las noticias de la República Popular de China;  se hacía más una realidad cuando se cerraron Italia Y España; y se llegó el día en que Colombia tuvo su primer caso y aunque debíamos prepararnos, no alcanzábamos a dimensionar una situación que era desconocida para todos.

El 24 de Marzo, cuando se inicia la Cuarentena en Colombia, nos vimos obligados a Cerrar nuestras oficinas de despacho y a buscar alternativas tecnológicas, para que nuestro equipo de trabajo, desde sus casas pudiera asesorar a los usuarios;  y recordemos que no estamos en una ciudad Capital.

Somos un terruño de arrieros paisas, enclavados entre montañas, que dificultan el acceso al internet;  en el que transportamos a los campesinos por vías terciarias; que tenemos un hospital de Segundo Nivel, al que asisten pacientes del Suroeste Cercano y un sinnúmero de ciudadanos con enfermedades que les obligan a trasladarse a la Ciudad de Medellín a realizar Quimios, Diálisis, Cirugías….

Y mientras las empresas que Cubren Rutas intermunicipales en Servicios de Buses, simplemente Cerraron sus puertas, Nuestra Cooperativa de Transporte, la Cooperativa de Transportadores de Ciudad Bolívar – Cotracibol -, No solo pensando en cumplir las instrucciones de la Señora Ministra de Transporte, Dra. Ángela María Orozco Gómez de cubrir al menos el 50% de las Rutas y Capacidad transportadora, evaluó cada una de sus rutas.

Las necesidades de la comunidad, los riesgos de contagio; las pérdidas generadas en cada viaje, porque el ingreso del 50% de pasajeros versus los costos de una ruta legal, generaban un hilo muy delgado para que la Cooperativa y sus asociados cayeran en el abismo de la Quiebra.

Y tuvimos que aprender a usar tapabocas como todos, y lavarnos las manos cada hora como todos, y usar Gel como todos, y a esparcir alcohol y desinfectantes como todos, a lavar nuestros vehículos diariamente como todos, pero no somos como todos.

Nos unimos como familia, como la Familia Cotracibol que somos y aportamos pequeños pesos que sumaron para comprar mercados para quienes en sus vehículos no pudieron generar el pan para su familia algunas semanas, nos unimos los empleados para reducir costos y Generar ideas y alternativas para transportar con separadores que permitan el aislamiento entre pasajeros para garantizar como hasta hoy cero contagios en nuestro transporte público.

Obtuvimos el beneficio que indirectamente ha tenido el transporte informal, que ha surgido a través de redes sociales, ofreciendo a los usuarios facilidad de transporte sin la documentación necesaria, mientras nosotros cumplíamos cada una de las excepciones.

Pero acá estamos, aquí continúa el temido y aún desconocido COVID 19, acá permanecemos  hoy en medio de una de las mejores cosechas cafeteras de la historia, batallando con la cultura del autocuidado, creando conciencia cada día para llegar a la otra punta del hilo de esta historia desconocida.

Una empresa Asociativa que es el único patrimonio de muchas familias y que no podemos permitir su desaparición. En un pequeño pueblo de nuestro país, en un lugar que pocos conocen y reconocen, apoyándonos como hasta hoy entre familias, contando con líderes y mandatarios que han dado todo para que nuestra economía no colapse, ESO ES COOPERATIVISMO, porque el miedo no puede robarnos lo humano.

Por: Gonzalo Arboleda

Concejal Ciudad Bolivar Antioquia /Colombia